"Luis Miguel, la serie" abordó uno de los temas más polémicos en la carrera del cantante: su vínculo con Arturo Durazo Moreno, jefe del Departamento de Policía y Tránsito de la Ciudad de México durante el gobierno de José López Portillo. Corrupción, tráfico de drogas y de armas, trata de mujeres y asesinatos fueron parte del historial de este oscuro personaje en la política mexicana.
¿QUÉ SUCEDIÓ EN LA FICCIÓN?
En una escena ambientada en 1981 la serie muestra a Luis Rey (Óscar Jaenada) pedirle al actor Andrés García (León Peraza) que le presente al militar, en su afán de que Luis Miguel cante en la boda de Paulina, la hija del presidente.
Durante el encuentro, Durazo Moreno muestra interés por Marcela Basteri (Anna Favella), mamá del cantante. Su esposo la presiona para que lo seduzca como un "sacrificio" para impulsar el éxito de la carrera de su hijo; pero ella se niega. Finalmente, a sus espaldas, ambos hombres llegan a un acuerdo.
Luis Miguel llega a presentarse en la boda de Paulina donde Marcela y Arturo se reencuentran. Él sigue coqueteándole y ella termina encarando a su esposo.
¿QUÉ DICE LA LEYENDA?
Según diversas fuentes, Arturo Durazo Moreno ayudó a impulsar la carrera del artista tras recibir favores sexuales, y la serie de Netflix deja entrever esto. Incluso habría financiado su primer disco "Un sol" (1982). Tras este encuentro, el artista mexicano logró:
- Cantar en la boda de Paulina López Portillo, donde estaban Emilio Azcárraga Milmo, fundador del actual Televisa, y directivos de EMI Capitol.
- Actuar por primera vez en el show "Siempre en Domingo" donde populariza el tema "1+1= 2 enamorados".
EL OSCURO PASADO DE DURAZO MORENO
Amigo desde la infancia del presidente José López Portillo, se convirtió en jefe del Departamento de Policía y Tránsito de la Ciudad de México, ganando notoriedad en la década del 80 cuando se revelaron sus millonarios ingresos y propiedades.
Según "Semana", estos provenían del "contrabando, el tráfico de drogas y de armas, la trata de blancas, la comisión sobre las compras de implementos para la Policía, y la cuota quincenal y 'voluntaria' que le pagaba cada uno de los oficiales y agentes de la institución para mantenerse en su cargo. Todo eso lo redondeaba el 'Negro' con la nómina completa de tres mil agentes imaginarios de la Policía, que solo existían en el papel y para que el jefe cobrara los salarios en su nombre".
El libro "Lo negro del Negro Durazo" (1983), escrito por su ex jefe de guardaespaldas José González González, reveló más actos oscuros: asesinatos y torturas cometidos por él a encargo de Durazo y López Portillo.
En 1982, huyó de México cuando el nuevo presidente, Miguel de la Madrid, empezó investigaciones de corrupción policial. Dos años después, Durazo Moreno fue detenido en Puerto Rico acusado de evasión fiscal por agentes del FBI. Fue extraditado a su país y recluido en 1986 para ser liberado 8 años después debido a su delicado estado de salud. Falleció en agosto del 2000, por un paro cardiaco ocasionado por un cáncer de colon terminal.
